Agosto 2019

El servicio al cliente ha sido por muchos años el esfuerzo diferenciador de las organizaciones exitosas en el mundo entero. Un buen servicio al cliente exige grandes inversiones en infraestructura, tecnología y capacitación.

A pesar de todos los esfuerzos de las organizaciones, el servicio al cliente tiene un factor determinante: la interacción entre las personas.

Todos los esfuerzos realizados y recursos invertidos pueden ser insuficientes si las personas que representan a la marca frente al cliente, no cuentan con los conocimientos suficientes de los productos que distribuyen.

Una mala experiencia de un cliente como resultado de una deficiente atención de un representante de ventas, puede crear un efecto exponencial negativo en el mercado debido a la enorme conectividad entre usuarios.

Sin importar el respaldo tecnológico de los productos y servicios, el primer acercamiento del cliente a través de la asesoría de los representantes de la marca determinará en gran medida el grado de confianza que el consumidor.

Significa que, igual de importante para las organizaciones es la inversión en infraestructura y tecnología que en capacitación del factor humano que interactuará con el mercado.

En ANDREAS STIHL S.A. de C.V. la inversión asignada al tema de capacitación de los representantes de marca, supera anualmente lo invertido en comunicación de tv nacional. La escuela de Servicio Técnico recibe anualmente más de 850 personas en sus diferentes cursos de capacitación y de forma remota la plataforma online provee de información constante a casi 1000 colaboradores STIHL de forma anual.

Asesoria especializada como estandarte diferenciador en el marcado, ha sido una de los mejores diferenciadores para STIHL en el mercado global.